A renovarnos como él águila, llegar al fondo para salir a flote
Por: Alejandrina Uribe-Betancourt @AlejandrinaUB
E-mail: alejandrinaubars@gmail.com
Apreciados amigos, hoy comienzo citando una historia que tal vez, ya varios de ustedes han leído, se llama “La renovación del águila” y que nos narra como este animal, rey absoluto de los cielos vive un proceso doloroso, intenso pero que le permite renovarse y resurgir de sus cenizas cual ave fénix. A continuación esta historia:
“El águila es el ave de mayor longevidad de la especie. Llega a vivir 70 años, pero para llegar a esa edad, a los 40 años deberá tomar una seria y difícil decisión.
A los 40 años sus uñas están apretadas y flexibles, sin conseguir tomar a sus presas de las cuales se alimenta.
Su pico, largo y puntiagudo se curva, apuntando contra el pecho. Sus alas están envejecidas y pesadas y sus plumas gruesas.
¡Volar se hace ya tan difícil!
Entonces, el águila tiene solamente dos alternativas: morir o enfrentar un dolorido proceso de renovación, que durará 150 días.
Ese proceso consiste en volar hacia lo alto de una montaña y quedarse ahí, en un nido cercano a un paredón, en donde no tenga la necesidad de volar.
Después de encontrar ese lugar, el águila comienza a golpear con su pico en la pared hasta conseguir arrancarlo. Después de arrancarlo, espera el crecimiento de uno nuevo con el que desprenderá una a una, sus uñas.
Cuando las nuevas uñas comienzan a nacer, comenzará a desplumar sus plumas viejas. Después de cinco meses sale para el famoso vuelo de renovación y para vivir 30 años más.” (Anónimo).
Amigos todos, este interesante relato sobre las águilas nos puede hacer reflexionar sobre nuestras vidas, porque puede suceder que estemos (al igual que el águila) atravesando por un mal momento, donde nos sentimos agotados, demasiado viejos (aunque físicamente seamos jóvenes), o sin fuerzas para seguir. O por una circunstancia cualquiera, hemos perdido todo lo que teníamos y nos enfrentamos a un fracaso (emocional, profesional, financiero, etc.). Sin embargo, este momento en el que tocamos el fondo del abismo o del pozo donde sentimos que hemos caído, también ES EL MOMENTO DE VOLVER A LEVANTARSE, NO HACERLO SERÍA MORÍR Y LO BUENO DE CUANDO YA UNO SIENTE QUE HA PERDIDO TODO, ES QUE PUEDE DARSE EL GUSTO Y LA OPORTUNIDAD DE EMPEZAR DE NUEVO. ¡YA NO HAY NADA QUE PERDER! Y si sientes que llegaste al foso pues es hora de empezar a escalar para salir de él.
En tal sentido. (o incluso sin que atravesemos por un mal momento), los seres humanos debemos darnos un tiempo, para detenernos en medio de la carrera del día a día o de la vorágine que representa dejarnos llevar por la corriente de los distintos acontecimientos que se dan en el entorno; a fin de resguardarnos (por decirlo de alguna manera), por un tiempo determinado y comenzar un profundo y necesario proceso de introspección, que puede ser la llave maestra que nos conduzca en la continuación de nuestro vuelo de victoria, o en la conquista de nuevos horizontes. De lo contrario estaríamos condenados a la muerte, muchas veces prematura, de nuestras almas y cuerpos porque dejamos de vivir la vida desde la consciencia espiritual para obedecer única y exclusivamente las demandas del cuerpo o agentes externos.
Si bien el águila decide tomar este necesario camino de renovación, donde la soledad (pues se dedica a vivir consigo misma este proceso), y el dolor no puede obviarse porque al desprenderse de su pico, uñas y plumas, sabemos que lo hace con la plena consciencia del pago que debe dar por ser “joven” otra vez. Podemos hacer una analogía con nosotros mismos, para descubrir que tarde o temprano al igual que esta reina de las alturas, deberemos con valor y decisión encerrarnos en lo más profundo de nuestras almas para meditar en silencio y atrevernos a desprendernos de costumbres, tradiciones y recuerdos que nos causaron dolor y que de seguir manteniéndolas dentro de nuestros patrones de vida, nos entorpecerán el camino de crecimiento espiritual. Sólo cuando nos libramos de la carga del pasado podremos aprovechar el resultado valioso que la renovación siempre trae. Por ende nos podemos preguntar: ¿Por qué y para qué nos renovanos? La renovación (cambiar lo viejo por lo nuevo) es vital en nuestra mente y en nuestra vida, porque esto nos permite tener nuevas energias y fuerzas y eliminar de nosotros lo que nos estanca, (Esto puede ser algun vicio negativo, rencores del pasado, miedos, baja autoestima, no emprender la acción al logro de nuestras metas, etc. Tal vez, están sean nuestras uñas, plumas y pico a cambiar.): Para atrevernos a dar este paso de renovación y transformación es necesario, al igual que el águila hacer un alto en el camino, y comenzar a analizar bien sea solos, o con la ayuda de un profesional (psicólogo o psicoterapeuta debidamente formado), analizar cuales son estas cargas que debemos dejar en el pasado. Así como el águila que se deshizo de las uñas y plumas viejas, el pico encorvado.
Por otra, parte este tiempo con nosotros mismos, sumergidos en nuestro mundo interior, nos puede servir no solo para salir de lo malo, sino también para descubrir nuestras fuerzas internas y cosas positivas que tenemos para progresar. El psicoterapeuta y consultor empresarial Frederic Solergibert en su libro “Lo que no se ve” dice: “Nadie sabe de los tesoros ocultos en el fondo del océano. Sumérgete en tu interior para hallar la alegría, la paz, la libertad y el amor que quizá no encuentras en las orillas de la vida”. Precisamente, estas “orillas de la vida”, las vemos convertidas en especies de espejismos que tras la promesa de un logro externo nos hace vivir en la fantasía de que nuestra realización o felicidad solamente será posible en la medida en que alcancemos determinadas metas (el amor de alguien especial, complacer algún capricho, más dinero, etc.). Tener metas o sueños y trabajar en por sus logros, ciertamente es una manera de dar un sentido a nuestra existencia, pero pensar que la felicidad está fuera de nosotros mismo y que ella sólo será posible una vez que coronemos la cima de de todas nuestras metas futuras, es una forma de sabotearnos a nosotros mismos el tiempo presente y es desconectarnos de nuestra realidad perfecta, donde como seres espirituales hemos sido creados para vivir felices, pues, de lo contrario caeremos en la trampa de que una vez conseguido lo que anhelábamos querremos algo mejor y así sucesivamente, hasta vivir en una carrera sin descanso donde la inconformidad será el motor que nos mueva por un sueño de felicidad externa que como el viento lo sentimos, pero no lo podemos atrapar y se escurre como agua entre las manos.
El silencio es la puerta para la conexión con nuestra Esencia Divina, es decir La Felicidad Total. La experiencia del silencio consiste en lograr el aquietamiento de todo pensamiento falso, negativo o de carencia, a fin de entrar en contacto con el pensamiento real, positivo y elevado de nuestra Esencia Divina. Para lograrlo debemos dedicar de nuestra parte es decir, disciplina y tiempo. La meditación y la respiración consciente representan una excelente vía para alcanzar el Silencio. En nuestro próximo encuentro hablaremos de este tema y presentaremos algunos ejercicios de meditación para lograr el tan necesario y renovador silencio. Que nos servirá de apoyo en nuestro proceso de renovación interior, para que luego como el águila volemos con plenitud y paz. De nada sirven los logros externos, si antes no alcanzamos nuestro plenitud interna. El vuelo en el mundo exterior comienza en el vuelo interior.
Cariños y bendiciones,
Alejandrina.
Copyright
Apreciados amigos estos textos de la serie Vivir en Armonía by AUB, son propiedad intelectual de su autora Alejandrina Uribe-Betancourt. En este caso si aclaro que la historia del águila (que coloqué al principio entre comillas) está en Internet bajo el título de “La Renovación del Águila” y es de autor desconocido, el análisis posterior a este escrito pertenece a mi persona, quien lo desee lo puede copiar y/o traducir, con tal que haga referencia a las fuentes, y que no sea con fines de lucro (comercial). En tal sentido, espero que citen la fuente con el link (hipervinculo) de este blog Pax, Ars, Vita by Alejandrina Uribe-Betancourt http://paxarsvita.blogspot.com/
A su vez, agradezco que por favor tengan la amabilidad de avisarme de su uso a mi "pequeña dirección" de e-mail:
alejandrinauribebetancourt@gmail.com o a mi Twitter @AlejandrinaUB (para así poder disfrutar del placer del re-blogging o re-twitting).
¡Que Dios TODOPODEROSO sea glorificado en todo lo que yo escriba, y sea para propagar la paz, la armonía y la Gracia Divina !
Alejandrina María
Gracias Alejandrina, por este interesante artículo que andaba buscando desde hace rato, pues cada vez que hablo acerca de renovar fuerzas lo menciono, pero ahora ya lo vi...QUE DIOS TE BENDIGA POR TU TRABAJO Y QUE TE SIGA USANDO
ResponderEliminarMuchas gracias Coronado y que pena veo tu mensaje hoy casi, dos años después, pero nunca es tarde para dar las gracias y un abrazo. Bendiciones a ti también.
Eliminar